Esta jornada las protestas llegaron a la capital de la provincia de Napo, Tena, tras 15 días de constantes protestas y vigilias nocturnas.

Tras 15 días de paros y bloqueos, la marcha de resistencia contra la construcción de la cárcel de máxima seguridad continúa en aumento y exigen la atención del presidente del país: «los pueblos y nacionalidades amazónicas lucharemos hasta las últimas consecuencias», declararon las organizaciones en sus redes sociales.

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Los habitantes de la provincia de Pastaza se sumaron al paro en la madrugada del lunes. Durante toda la noche la multitud enardecida se movilizó con lanzas y palos, bloqueando la Troncal Amazónicas.

«Esta acción se realiza en respaldo a la provincia hermana de Napo que lleva 14 días de paro», informó la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confeniae), respecto a la movilización de pueblos y nacionalidades de Pastaza en la Vía Puyo – Macas.

Los manifestantes avisaron que las acciones de Pastaza se replicarán y que las provincias “seguirán elevando su voz”.

En la cuenta de X de la Confeniae declaran que el pueblo movilizado de Archidona ejerce poder popular y cierra el municipio para que se sumen a una gran marcha ciudadana que se dirigió hacia Tena.

Esta tarde la nacionalidad Waorani del Ecuador (NAWE), junto a su organización provincial de Pastaza (OWAP) se unieron oficialmente al paro en respaldo a la provincia de Napo. El mensaje de las movilizaciones es claro: NO a la cárcel de máxima seguridad en la Amazonía.

Anteriormente se denunció el desplazamiento de mayor presencia policial con el fin de destruir las movilizaciones populares contra la construcción de las megacárceles de Archidona y Santa Elena.

De acuerdo con las comunidades indígenas, la cárcel de Archidona será la causante de la pérdida de ecosistemas, zonas educativas y al menos 90% de la economía local de la zona.

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